Un paraíso protegido por la naturaleza y por quienes la habitan

En 1993, la UNESCO declaró a Menorca como Reserva de la Biosfera. Este reconocimiento celebra la armonía entre los habitantes de la isla y su entorno natural, siendo uno de los lugares mejor conservados del Mediterráneo.

¿Qué es una Reserva de la Biosfera?

Una Reserva de la Biosfera es un modelo de equilibrio entre la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible. En Menorca, esto se traduce en paisajes cuidados, biodiversidad marina y terrestre, y comunidades locales comprometidas con el medio ambiente.

Zonas protegidas

Menorca cuenta con tres niveles de protección:

• Núcleo: El Parque Natural de S'Albufera des Grau, Illa d’en Colom y Cap de Favàritx.
• Zonas de amortiguación: Áreas Naturales de Especial Interés (ANEI), que cubren el 40% del territorio.
• Zonas de transición: El resto del territorio menorquín, donde se equilibra la actividad humana con la sostenibilidad.

Parque Natural de S’Albufera des Grau

Esta laguna de 67,7 hectáreas es el núcleo de la Reserva. Separada del mar por una barrera de arena, su ecosistema acoge a más de 11.000 aves acuáticas de 100 especies distintas en invierno. Es un lugar ideal para la observación de aves y la conexión con la naturaleza más salvaje de la isla.

Reserva Marina del Norte de Menorca

Creada en 1999, esta zona abarca 5.119 hectáreas entre la bahía de Fornells y el Cap Gros. Es la mayor reserva marina de Baleares, hogar de una biodiversidad marina sorprendente: peces martillo, corales, moluscos y hasta cabras en islotes remotos.

Destaca la barrera de posidonia de Sa Nitja y la zona de especial protección de Cala Barril a Punta de Mar, donde se reproducen especies como la langosta y la merluza. Ideal para los amantes del submarinismo y la naturaleza marina.

Un ejemplo para el mundo

Menorca no solo protege su entorno, lo celebra. Cada sendero, cala o pueblo respira un compromiso silencioso con la tierra. Ser Reserva de la Biosfera es más que un título: es una forma de vivir.